viernes, 7 de septiembre de 2012

Sexo, mentiras y vídeos de Whatsapp

Con el auge de las tecnologías y el poco respeto a las personas y la intimidad actual, la difusión de fotografías y vídeos comprometidos está a la orden del día. En esta ocasión, el escándalo llega porque se han difundido unas imágenes íntimas de Olvido Hormigos, una concejal de un pueblo de Toledo, cuyos vecinos la han insultado por este hecho, mostrándonos una visión de la España profunda y cañí que no se va ni a tiros, por mucho que se trate de dar una imagen diferente al resto del mundo. Olvido Hormigos presentó su dimisión  por este hecho,aunque después se lo pensó y la revocó, dando una imagen de honradez política y valentía a todos sus compañeros de profesión. Desde estas líneas, quiero brindar mi apoyo a una persona, a una mujer que ha sido insultada sólo por el hecho de ser mujer. ¿Hasta cuándo tendremos que soportar esta hipócrita sociedad que se escandaliza por ver unas tetas y no por la violencia que sacude el mundo? ¿Cuánto tiempo tendrá que pasar para que la gente se mueva luche por las cosas importantes y no por el dichoso fútbol o el insulto a alguien que comete un error? Mucho me temo que si esto no cambia, España seguirá viviendo como en los tiempos de María Castaña.

Malos tiempos para la lírica




Parece mentira que la canción del grupo Golpes Bajos siga siendo tan actual como cuando sonaba allá por los primeros años de la década de los '80. Como si el tiempo no hubiese transcurrido, casi treinta años más tarde, la Lírica atraviesa una mala etapa donde es vapuleada sin piedad ni conocimiento. Cualquier persona que trata de componer, de crear o escribir se enfrenta a un tribunal inquisitorial compuesto por la gente de a pie, y políticos corruptos que quieren la Lírica para su enaltecimiento personal y su glorificación magnánima. Hace unos días me enteré que el Canal Sur 2 dejará de emitir su programación a partir del mes de octubre por falta de rentabilidad. A quienes han tomado la decisión no les importa la calidad de sus programas ni la profesionalidad de las personas que allí trabajan, o si se verán en la calle. Lo cierran, sin más, o mejor dicho, ocupan la frecuencia con los contenidos de la primera emisora adaptados para discapacitados. Estamos ante una censura televisiva camuflada de crisis o falta de rentabilidad. Me unen lazos muy fuertes a esta agonizante emisora, en la que tengo a varios amigos trabajando. Por esto, rechazo desde este blog el hipócrita cierre de Canal Sur 2, y exijo que los contenidos sean respetados y reubicados, pues su calidad no merece que sean relegados al limbo o al olvido.