jueves, 22 de diciembre de 2011

El negocio del hambre

A veces creo que no se quiere acabar con el hambre en el mundo porque no resulta nada rentable y se quiere especular con los países que pasan hambre y sus habitantes que, literalmente, no tienen un trozo de comida que echarse a la boca. se ponen demasiadas iniciativas en marcha que sólo sirven para engordar las cuentas bancarias de ONG's que contratan con sueldos precarios a sus trabajadores y les obligan cual mafiosos de la mendicidad a recaudar dinero a cualquier precio, sin aceptar otra cosa que no sea el vil metal. Me duele ver que con un poco de buena voluntad por parte de los gobiernos se podría hacer mucho, pero más me duele comprobar que se sacan mil gilipolleces para paliar el hambre. ¿Por qué no se deja de mandar alimentos y se enseña a ser autosuficientes? Pues porque eso no es algo lucrativo ni deja beneficio. Es más rentable comerciar con la pena y el chantaje emocional en el telediario a la hora de comer que destinar el dinero recaudado para hacer del Tercer Mundo un vasto territorio productivo que sea capaz de generar sus propias riquezas. Asco me da ver esta pasividad y esta proliferación de mercaderes del hambre, a los cuales poco o nada les importa la necesidad ajena ni la mortalidad infantil, mientras los gobiernos les apoyan a base de subvenciones y partidas que deben ser destinadas en la declaración de la renta. Espero y deseo que no se especule más con la necesidad de la gente, porque esto es un delito grave, a pesar de no estar tipificado en el código penal.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Primer trailer de El Hobbit


No recuerdo cuántos años hace que leí por primera vez El Hobbit, que me cautivó tanto o más que el resto de la trilogía de El Señor de los Anillos, de J. R. R. Tolkien, pues me pareció un libro entretenido, divertido y ameno, de fácil lectura, algo que a veces resulta difícil en su literatura, sobre todo, como yo digo, cuando al autor se le precipita hacia esa parte del terreno que pisa el final de sus extremidades inferiores de manera sutil, lenta y lenta aquella parte que todo ser humano de género masculino posee entre sus piernas y que sirve para los momentos de reproducción y ociosidad mientras nos muestra con una extensa culta y detallada terminología todo lo que acontece a su alrededor, sin obviar detalle alguno, o de forma más coloquial se le caen los huevos describiendo lo que sucede en la narración. En esta ocasión, y tras muchos vaivenes, Peter Jackson vuelve a ponerse tras la cámara, para devolvernos a la Tierra Media, lo que garantiza que será una excelente producción, pero para ello deberemos esperar al 14 de diciembre de 2012.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Pataletas y piratería

A pocos días del lanzamiento de su última novela, Lucía Etxebarría nos sorprende con su renuncia a escribir y publicar más libros, argumentando que la gente se descarga más libros de forma ilegal de los que vende. En una actitud infantil, falta de madurez y coherencia, la ganadora del premio Planeta de 2004 demuestra el nulo interés que tiene por la Literatura, pues sólo se sienta a escribir a golpe de talonario, sin importarle otra motivación más profunda que un puñado de euros. Es conocido y vox populi que esta autora reniega de Internet y todo lo que supone, desde las redes sociales a los blogs, mas no tiene reparos en usarlos a su conveniencia para obtener publicidad y propaganda gratuitas a través de polémicas constantes y no la venta de su obra, que está cayendo por su falta de respeto a los lectores, a quienes no duda en tratar con desprecio y altanería cuando acuden a las diferentes firmas de ejemplares, ya que suele exigir que abandonen el lugar donde ella se encuentra autografiando sus libros una vez que ha cumplido con el trámite. Si Lucía Etxebarría deja de escribir y publicar, estará haciendo un gran favor a la Literatura y los lectores, ya que ambos no se merecen ser despreciados de forma tan gratuita por una persona cuyo interés es la avaricia y el materialismo más superficial, pues es harto evidente que jamás pasará a los libros de Historia como una escritora que merezca ser estudiada.