lunes, 11 de julio de 2011

Libertades y respeto

Esta tarde, tras venir de mi paseo diario en bicicleta, he discutido con un vecino. La cosa no tendría mayor importancia o repercusión de no ser porque este señor me acusó de ausencia de vergüenza cuando llevaba tantos años sin hablarme que no fue capaz de darme el pésame por la muerte de mi madre, de lo cual han pasado casi tres años. Incapaz de callarme, le espeté que no se atreviese a juzgar mi actitud tras dar una broma mientras no tuviese la decencia de mostrar su respeto con mi familia ante la grave pérdida que en octubre de 2008 sufrimos. Lejos de reflexionar, actuar con educación y/o respeto, se defendía alegando que cada cual es libre de actuar como estimase conveniente. Pues bien, yo creo que defender esto es estar carente de vergüenza, educación, respeto y formas, ya que se ha de tener un mínimo de civismo para poder dar ejemplo en la actuación. La libertad se debe emplear para ir a un concierto, elegir un restaurante, leer un libro u otro formato de lectura, valga la redundancia, ir al cine, votar a unos u otros o hacer lo que se estime conveniente. Sin embargo, cuando algo grave pasa, es un deber moral y humano apoyar a quien sufre, ya que de lo contrario seríamos bichos y animales irracionales, carentes de cualquier tipo de sentimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu opinión es importante