sábado, 17 de enero de 2009

Las preguntas de la soledad

Contemplaba en la profundidad de la noche el fuego de la chimenea, mientras degustaba aquel licor en la copa, recreándome en su saber, abierto a los recuerdos de una vida pasada, llena de plenitud y abundancia. Recordaba mis viajes por Europa, largos por su recorrido y llenos de intensidad por las experiencias vividas, aquellas que no regresaban por mucho que trataba de invocar su recuerdo y su experiencia. Nada era igual de un momento a otro. La vida pasaba irremediablemente, y yo la veía transcurrir. Aquella imagen del fuego me retraía años atrás, a mi juventud, tan lejana... El sonido del silencio nocturno era interrumpido por los búhos y el crujir de las llamas. Vivía en una vasta extensión de tierra, solo, a la espera de que mi familia se reuniese conmigo. Así pasaba todas y cada una de las noches, contemplando la vida, sin saborearla, disfrutarla o vivirla. Para mi dejó de tener sentido y un gran vacío imposible de llenar, por muchas riquezas materiales que poseía. Notaba y sabía que me faltaba algo, mas no sabía o negaba querer saberlo. Me preguntaba si tantos privilegios servían de algo. Me preguntaba si con menos sería feliz o lograría serlo...

¡Se estrena Watchmen!

No hemos tenido que esperar al martes que toma posesión Obama para ver qué pasaría con el asunto de los derechos para su adaptación cinematográfica, en poder de la Fox, aunque nunca los usó para producir la película. Tan sólo faltan menos de dos meses para poder ver esa recreación de Marte que tanto adoro, o la chapa que luzco desde hace años en una de mis chaquetas. Me alegro que, por una vez, estos ejecutivos hayan pensado en el aficionado, en la aficionada, hayan permitido que podamos disfrutar de una película que puede convertirse en una obra maestra, y que a la vez que deseamos que se estrene, temenos su première, ya que puede ser un fiasco. Aquí no caben las medias tintas. Celebremos que una decisión judicial no ha impedido que podamos juzgar el trabajo. Veinte años después del anuncio de Miguel G. Saavedra en un tebeo de Batman de la adaptación, sólo cabe esperar que llegue el día 6 de marzo. Allí estaremos, si nada lo impide, luciendo la camiseta que preparé en verde manzana, con el smiley, exclusivamente para ese estreno... Ahora quiero poner el widget que me he descargado, para saber y recordar el tiempo que queda...

jueves, 15 de enero de 2009

No cerréis la voz


Hace unos días, leía en el blog de una amiga (http://cristaljar.blogspot.com) que se iba a cerrar un periódico con una trayectoria de ochenta y cinco años de antigüedad y veteranía, por culpa de uno de esos ERE's tan de moda, hoy por hoy, y contra los que nadie hace nada, demostrándonos así su falta de vergüenza y ética. Ciertamente, son varios los trabajadores y trabajadoras que perderán su empleo, pero veo más grave que la pluralidad informativa pierda uno de sus puntos de vista. Cada periódico que muere es un duro golpe a la libertad de expresión, a la opinión plural y a la noticia objetiva. Avariciosos mercaderes que sólo buscan la rentabilidad para ellos, en sus cómodas esferas destruyen el empleo, en comandita con los sindicatos sobornados por el Gobierno vendido a la Banca para seguir aterrorizando al pueblo llano, como aquellos señores feudales cuando exprimían a sus vasallos. Ayer hablaba de terrorismo, hoy llamo a la rebelión, a la lucha en contra de estos abusos. Movilicémonos y hagámonos escuchar. Se están pasando, y no debemos permitirlo. Va siendo hora de tomar de nuevo las calles, de levantar barricadas. No es nuestro trabajo ni nuestro bienestar lo que está en peligro, sino el de nuestros hijos, el de nuestros descendientes. Y eso es intolerable. Debemos organizarnos y plantar cara. Ya está bien. Ya está bien...

Mierdecillas

Ese es el calificativo con el cual somos definidos por los grandes capitalistas, esos que se inventan las crisis y sus derivados etimológicos o su lenguaje políticamente correcto. Estos desalmados seres de otra esfera, otro nivel, se creen con el derecho a vapulearnos, arruinando nuestras economías, y lo más importante, nuestras vidas, de forma impune, con la complicidad de la clase política, que ha demostrado su ineficacia en otra ocasión más. Tanto a economistas, como a políticos, los mierdecillas les importamos poco. Tan sólo interesados en recoger beneficios económicos a base de exprimir al máximo la salud de los menos favorecidos, esa gran mayoría de personas que tiene dificultades para llegar a final de mes. Ya está bien de refundar capitalismos, de bancas repartiendo beneficios y de sembrar el caos y el terror. Ustedes, esos grandes capitalistas, entérense de una vez, si leen estas líneas, cosa que dudo, son perfectamente definibles como terroristas. Sus actitudes cargadas de avaricia y su forma de arruinar al mundo son comparables a cualquier atentado con miles de víctimas mortales. Yo acuso, señores grandes capitalistas, que son una banda terrorista, y que su daño es más peligroso que las otras organizaciones que sólo acaban con la vida de ciertas personas.

martes, 13 de enero de 2009

Sobre acentos y opiniones

Yo no entiendo la manía que todo el mundo tiene en decir que en Andalucía se habla mal, cuando es el sitio con mayor riqueza lingüística. Pocos errores gramaticales escucho amén de otras expresiones que me harían sangrar los oídos, como en aquella ocasión que escuché, por espacio de menos de un minuto, a Jiménez-Losantos. Ahíto de ser considerado como el andaluz gracioso, o que se nos acuse de no saber hablar porque nuestro castellano dista de la supuesta neutralidad que reina de Despeñaperros para arriba, quiero reivindicar el andaluz como lengua propia, con su gramática y sus textos, algunos serios, otros no tanto, su cultura y sobre todo la esponja que es. Me he cansado de escuchar que hablamos mal porque no pronunciamos tal como se escribe. Señoras, señores, no hay incorrección en interpretar la lengua escrita. No sé de ningun otro idioma que se pronuncia tal cual está plasmado en el papel o la pantalla. Quisiera recordar, como en otra ocasión, que la primera gramática sobre la Lengua Española, fue redactada por Elio Antonio de Nebrija, un lingüista andaluz, nacido en Lebrija. A ver si dejan de considerarnos incultos e incultas por nuestra forma de hablar, puesto que sabemos expresarnos con una personalidad y una riqueza que muchos desearían conocer.

lunes, 12 de enero de 2009

La moda de los Superhéroes


Antes de que llegaran las fiestas navideñas, asistí a una charla sobre coleccionismo y arte moderno. En aquella ocasión, se hablaba de coleccionismo de diferentes obras como la escultura, los cuadros, la fotografía, las instalaciones o el vídeo. En el turno de preguntas, no pude evitar interesarme dónde se podían catalogar los coleccionistas de originales de tebeos, lo cual ocasionó un debate y que me informasen de una exposición de la moda en los superhéroes, con diseños de gente como Armani o Galliano. Cada cual dando su punto de vista, y comprobando los pocos tebeos que han podido leer en su vida. Aún así, me pareció de lo más interesante hojear y ojear el catálogo, el cual pude comprar hace escasas horas gracias a Fernando Iwasaki, que me dijo dónde estaba a la venta. Se trata de un libro muy interesante, con las tapas en metal que haría las delicias de cualquier amante de los superhéroes y la moda, mezclados ambos, dando un resultado extremadamente interesante.

domingo, 11 de enero de 2009

Coleccionables

Como cada año, la tradición de los coleccionables inunda los kioscos y sitios de venta de prensa. Mil historias inservibles, cacharros cuya utilidad es inimaginable o cursos que no se sabe muy bien para qué sirven. Lugares inundados por cartones de gran tamaño a precios reducidos en esas entregas número uno, pero que después supone un gran desembolso de dinero. Yo soy de esos que suele hacer uno o dos coleccionables al año, dependiendo de lo interesante que sea el producto ofertado, o sea un capricho, como mi copia autentificada del Beato de Liébana, aunque pienso que hay sobresaturación de estos productos. Los primeros días de entregas de fascículos se convierten en un auténtico suplicio, sorteando cartones, y suele ser el único tema de conversación en el kiosco y lugar de venta de prensa, unas veces con mayor filosofía. Otros con menos. Pero en definitiva, otra tradición más. No sé qué sería de los princios de curso o de año sin esos desembarcos de fascículos, coleccionables o detalles de ese tipo. Eso sí, rogaría, como consumidor y usuario, que los cartones fuesen más pequeños. Contribuyamos en algo para evitar el cambio climático.